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Santos de Sevilla




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...y noticias afines




Don Marcelo de Sevilla, el León de Cristo, Madre de los Pobres...
Marcelo Spínola y Maestre, el Padre Tarín, Sor Angela de la Cruz,
tres figuras claves de la Iglesia de Sevilla durante el último tercio del siglo
XIX y primeros lustros del XX, las tres tenidas por santas aún
en vida... Los tres coincidieron en alertar, con sus palabras y sus
ejemplos de vida, del peligro de los desniveles sociales y del auge de
los fermentos revolucionarios que terminaron ensangrentado
España en los años treinta.
(Sevilla en tiempos de los Anti-Dios, por Nicolás Salas. Editorial Castillejo)

MARCELO SPÍNOLA Y MAESTRE (San Fernando, Cádiz, 14 enero 1835-Sevilla, 19 enero 1906), hoy beato, venerado siempre como el arzobispo mendigo por una ciudad que lo tuvo de párroco en San Lorenzo, de obispo auxiliar (1881-1884) y de cardenal arzobispo (1895-1906).
FRANCISCO DE PAULA TARÍN ARNÁU (Godelleta, Valencia, 7 octubre 1847-Sevilla, 12 diciembre 1910), venerable, hoy en proceso de beatificación, jesuita misionero que dedicó su vida a los más pobres y enfermos de los barrios míseros de Sevilla. (Los interesados en su Causa de Beatificación pueden informarse en 954 915 840 (Telf.) 954 375 596 (Fax) - calle Jesús del Gran Poder, 40 - 41002 Sevilla)
MARÍA DE LOS ÁNGELES GUERRERO GONZÁLEZ (Sevilla, 30 enero 1846-Sevilla, 2 marzo 1932), llamada "sor Ángela de la Cruz", venerada como Madre de los Pobres, fundadora de la Compañía de Hermanas de la Cruz (Sevilla,2 de agosto de 1875), fue canonizada en Madrid el día 4 de mayo de 2003, por el Santo Padre Juan Pablo II.
En las tres personas citadas se dan circunstancias excepcionales, como el ser tenidas por santas aún en vida, en haber superado el medio siglo sin que decayera la devoción de sus fieles, y en mantenerse cada vez más vivo su recuerdo en nuestros días como demuestra la presencia de personas en sus lugares de enterramientos, para rezar ante sus sepulcros.
Quienes deseen conocer las vidas de estos personajes excepcionales, pueden consultar las siguientes obras, todas escritas por el sacerdote José María Javierre Orta:
Don Marcelo de Sevilla. José Flor, Editor. Barcelona, 1963.
El arzobispo mendigo. Biblioteca de Autores Cristianos. Madrid, 1974.
El León de Cristo. Biblioteca de Autores Cristianos. Madrid, 1980.
Madre de los Pobres. Editorial A. Madrid, 1969 (Premio Ciudad de Sevilla 1968)

LA ÚLTIMA BEATA SEVILLANA




Victoria Díez
Esperar el cielo, construir a tierra

Victoria Díez es el carisma de la Institución Teresiana llevado a la práctica
en el vivir cotidiano. Es una prueba elocuente de que la santidad es posible
para quienes viven su profesión como un camino de audacia y de
entrega al Evangelio.

Con motivo del Año Centenario de su nacimiento (1903), Loreto Ballester, Directora de la Institución Teresiana ha recordado palabras de Victoria y su testimonio de vida “abriendo el camino con su entrega a los suyos, con un ejercicio de la profesión serio y comprometido, "maestra de cuerpo entero", mujer fiel a la fe recibida hasta el martirio, “con Cristo muy dentro del corazón y siempre en primera fila”.

Victoria ejerció como maestra de escuela pública, primero un año en Cheles, provincia de Sevilla y después en una zona rural de la Provincia de Córdoba ambas pobres con muchos alumnos y pocos recursos.

En 1928 llegó a Hornachuelos, provincia de Córdoba, con 25 años y con clara conciencia de haber recibido una importante misión: Le habían confiado un pueblo y se sintió responsable de él. Trabajó en la Iglesia local en la Acción Católica, en la catequesis, en la preparación de catequistas, en la ayuda incondicional al párroco.

El 11 de agosto de 1936, fue detenida en su domicilio, encarcelada y conducida con un grupo de hombres del pueblo, entre los que estaba también el párroco Don Antonio Molina, hacia la Mina del Rincón. En el camino, Victoria anima a quienes han sido apresados con ella recordándoles que les espera el encuentro con Cristo. Es fusilada al amanecer del día 12 de agosto.

Puede decirse que Victoria fue maestra ejemplar en sus clases y fuera de ellas. Educó con su vida y con su muerte. Entonces y ahora.

1903. Victoria Díez y Bustos de Molina nace el 11 de noviembre en Sevilla (España).
 
1917. Obtiene la Diplomatura en Dibujo.
 
1923. Obtiene el título de maestra tras haber cursado estudios en la Escuela Normal Superior de Maestras de Sevilla.
 
1926. Se incorpora a la Institución Teresiana. Aprueba las Oposiciones al Magisterio Nacional.
 
1927. Llega como maestra nacional en Cheles, (Badajoz).
 
1928. Se traslada a Hornachuelos (Córdoba), a una escuela unitaria de 70 alumnas.
 
1929. Organiza clases nocturnas de obreras y Biblioteca para ex-alumnas. Atiende a las familias. Colabora con la Parroquia en la preparación de catequistas e impulsa la creación de la Juventud Femenina de Acción Católica.
 
1931. Es nombrada vocal y después Presidenta del Consejo Local de Primera Enseñanza de Hornachuelos.
 
1936. Es detenida el 11 de agosto en su domicilio de Hornachuelos. Es fusilada en las cercanías, junto a la Mina del Rincón, mártir de Jesucristo, al amanecer del día 12.
 
1993. Es beatificada en Roma, junto al padre Pedro Poveda, el 10 de octubre, por S.S. Juan Pablo II.
 
2003. Se inician las celebraciones del centenario de su nacimiento.




Escríbenos: info@institucionteresiana.org
Webmaster: webmaster@institucionteresiana.org


Sevillanos caminos de los altares
(Avance)

+ Beatos en proceso de canonización:

Juan Grande, Diego José de Cádiz, Marcelo Spínola, Francisco Díaz de Ecija, Madre Dolores Márquez, Manuel González García.

+ Siervos de Dios en proceso de beatificación:

Miguel Mañara, Francisco Tarín, Fernando de Contreras, Esteban de Andoain.

+ Otras personas pendientes de procesos de beatificación:

Padre Francisco García Tejero,   Madre Mercedes Trullás y Soler, Padre Torres Padilla, Fray Sebastián de Jesús Sillero, Sor Francisca Dorotea, Madre Isabel, Madre Teresa de Jesús, Sor Barbara de Santo Domingo, Padre José María Rubio, Madre Cristina de Arteaga, etc.

Otras noticias

(En obras)



Dieciocho años en Sevilla

Manolo Rodríguez, en su sección "Nosotros" que publica de martes
a sábado en el diario "El Mundo", publicó el 23 de agosto de
2000, el siguiente comentario:

  "Hoy, 23 de agosto, cumple 66 años el arzobispo fray Carlos Amigo Vallejo.                                

   Felicitemos, pues, al pastor de la Iglesia sevillana, en cuya archidiócesis lleva ya 18 años largos.

   En concreto, fue el 22 de mayo de 1982 cuando llegó a Sevilla procedente de Tánger -cuyo obispado regía desde el año 1973- y eso le ha permitido asistir al cambio de perfil de una ciudad que, precisamente en estas últimas décadas, ha vivido sus momentos más decisivos.

   Desde entonces, por la apasionante vida de fray Carlos se han sucedido momentos históricos tan notables como la muerte de su antecesor, el cardenal Bueno Monmal, dos visitas a Sevilla del Papa Juan Pablo II, en 1982 y en 1993, la boda de una infanta  de España, las dolorosas honras fúnebres por los asesinatos de Alberto Jiínénez Becenil y de su esposa Ascensión García y la celebración de una Exposición Universal que convirtió a Sevilla en escaparate del mundo.

   Pero junto a todo eso, y más allá de las menudas e inevitables controversias temporales, fray Carlos ha dejado la profunda huella de hombre bueno en medio de una sociedad cambiante.

   Ha sido, y es, un cura comprometido con su tiempo, valiente cuando ha tenido que hablar del terrorismo, del paro o de la droga, sensible cuando ha mirado a los pobres y moderno cuando ha interpretado los signos de los tiempos nuevos. En definitiva, una buena persona".


250 Aniversario de Fray Isidoro de Sevilla

El "Boletín de las Cofradías de Sevilla" incluye en su número 497, del
mes de agosto, varios comentarios con motivo de cumplirse el próximo día 7
de noviembre el 250 aniversario de la muerte de Fray Isidoro de Sevilla,
"uno de los principales apóstoles marianos de Sevilla y fundador de
la devoción a la Divina Pastora, hoy extendida por
múltiples pueblos, ciudades y naciones".

Escriben Juan Martínez Alcale, Juan Carlos Martínez Amores, y
Martín Carlos Palomo García, sobre Fray Isidoro de
Sevilla, la pintura llevada a la estampa (La Divina Pastora de
Tovar), y la Divina Pastora de las Almas.

                (Imprima y divulgue los textos)

      (Al día 27.01.2003)







 
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